martes, 13 de octubre de 2015

"Yo creo que el deporte es de inclusión social y creo que importantísimo para los chicos"



Si bien nos quedó un poco vieja, no dejes de leer esta entrevista al Colo Vainstein, ahora 
jugador del Ciudad Encantada antes de ir a España, donde habló de todo.



Colo contanos un poco como comenzaste en el handball.

Bueno, mira toda mi vida fui al Ward. Toda mi  familia fue al colegio de Ramos Mejía, siempre fue una institución que fomentó el handball. Arranque jugando a los ocho años, más o menos nueve. Después me fui para el lado del futbol, del básquet y deje un poco de lado el handball. Justo se dio
que el papa de un compañero mío del colegio me intentó convencer de volver a la actividad para estar con los compañeros, con el grupo. Al principio estaba medio reacio a empezar handball de nuevo, pero me motivó y eso fue a la edad de once. A partir de ahí empecé y no deje más, esa fue como mi iniciación.


A los 18 años te fuiste, ¿Cómo fue la experiencia en Italia?

Si, estaba transitando el último año de colegio que fue cuando nos tocó el mundial de Bahrein. Justo vino un representante italiano a ver unos partidos de Liga de Honor, yo en esa época ya estaba jugando en Liga. No vino a verme a mí específicamente, sino que vino a ver a varios jugadores. Se dio que cuando termino el partido me sugirió si quería ir a hacer una prueba a Italia y yo con 17 años todavía me quedaban unos meses de colegio. Así que le dije que en diciembre volvíamos a hablar porque mi intención era terminar el colegio y después ir a probar una experiencia. Se dio la casualidad que con todo lo que fue el año de handball de ese 2007  tuve muchos mundiales, muchos torneos y perdí mucho tiempo del colegio así que me lleve una que otra materia a febrero. Le dije en diciembre que me esperara hasta febrero para hacer la prueba.

Fueron los meses que más lentos se pasaron…

Exacto, pero si te gusta el durazno bancate la pelusa. Me gustaba el handball y me dediqué mucho tiempo ese año a entrenar  y mira, me lleve dos materias nada más.

¿Se puede saber cuáles?

Si, historia en inglés y matemática. Típica, una clásica. La profesora me preguntó si la había pasado bien en el viaje pero que me iba a ir directo a febrero porque no había ido en todo el año.
Italia parece ser la escala en Europa que toman como decisión muchos jugadores para irse al viejo continente. ¿Qué diferencias encontrás entre el handball italiano y el handball argentino?
Cambió mucho en los últimos años, pero a mí me tocó justo irme en los últimos años en que la liga era muy fuerte. Había muchos jugadores extranjeros, había bastante presupuesto a los equipos. Yo tuve la suerte de ir a uno de los mejores equipos de Italia, en los años siguientes salimos campeones y todo. Fui a una ciudad donde el handball era muy importante, la gente estaba interesada, era un pueblo chico pero el handball era el deporte principal. En el Conversano en la ciudad de Bari.

¿En Italia jugaste de extremo no?

Si, jugué de extremo, hubo partidos que me tocó jugar de pivot, capaz que alguno que otro de lateral, pero si jugaba casi siempre de extremo.

El fin de semana te vimos de extremo, pero ¿cuál es la posición que te sentís mas cómodo?

Te voy a ser sincero, de chico siempre me gusto jugar de pivot.

Te gusta recibir golpes…

Varios me lo dicen, como que me gusta que me peguen, pero no, es mi forma de jugar. En la selección siempre me tocó jugar de extremo por eso también a Italia fui como extremo. Pero en Ward a veces juego de lateral, de central a veces, de todo.

Vos después decidiste volver a la argentina, ¿cómo fue esa decisión? debe hacer sido difícil por lo que estabas dejando pero tal vez venías con ideas a futuro.

Yo tuve una lesión un año cuando estuve en Italia. A mí no me gustó mucho como trató el club el 
tema de las lesiones y eso. Además no cumplieron con el contrato y varios del equipo tuvimos problemas así que en un momento también tiraba un poco el volver, la familia. Tomé la decisión, resigné dinero para volver y volví convencido de la decisión que había hecho.

Volviste, llegaste a Ward y empezaron a asentarse de a poco. Apuntando a torneos, el Panamericano, empezaron a sumar buenos resultados en Femebal, ¿cómo fue esa vuelta?¿te acoplaste al equipo? ¿Fue difícil volver al juega de acá en particular?

Cuando me tocó volver venía de una lesión así que estuve un tiempo parado pero la verdad que me acople rápido porque conocía a muchos de mis compañeros, habíamos jugado desde chicos. Después se dieron años en que estuvimos peleando arriba, ganamos campeonatos, nos tocó participar de un Panamericano. Es lo que siempre intentamos, estar ahí en los puestos de arriba.

En los Panamericanos, ¿qué creés que tiene el handball de Brasil y el argentino, comparándolos, dónde creés que puede llegar a estar el cambio en el handball nacional?

La diferencia principal es que ellos se dedican a eso principalmente. La mayoría de los que juegan en Argentina se dedican a trabajar y luego de terminar la jornada se van a entrenar a sus clubes pero pensá que un equipo de esos se dedica a entrenar doble turno. Cuando tienen una lesión o algo pueden ir al médico, tienen tiempo para recuperarse para descansar bien. Acá un jugador de handball tiene que ir a trabajar, salir a las 6 de la tarde del trabajo, llegar a la casa, agarrar el bolso e ir a entrenar. Es el tiempo de dedicación que se le da al deporte.

Es el sacrificio el que hace uno termine amando este deporte…

Claro, después cuando entrás en la cancha contra un equipo brasilero tenés la sangre en los ojos. Es mucho el sacrificio que uno hace a veces para poder participar de un torneo así. Cada vez que un equipo hace un torneo de esa envergadura tiene que pagarse el hotel cada uno, el viaje, el pasaje. Todo cuesta más, pero como cuesta más también se valora el doble.

Estuviste varios años jugando para la selección, contanos como fue la experiencia con esa gran camada de jugadores argentinos.

El primer mundial fue el juvenil, que fue algo histórico. Se logró un cuarto puesto que la verdad no lo esperábamos pero como se dio el torneo de empatar el primer partido del campeonato con lo que era el campeón europeo, Croacia. También nos motivó y nos hizo entender que estábamos cerca de todo. Después en el mundial de Egipto del 2009 lo que quisimos demostrar más que nada, que no era casualidad, lo que éramos nosotros, como equipo, a lo que podíamos llegar. Muchas veces se dice a la edad de 18 años el físico es muy parecido, se puede dar el resultado así, pero ya de más grande se hace más difícil porque los europeos sacan una diferencia. La verdad que igual fuimos al mundial de Egipto con expectativas de estar en semifinales y estuvimos a un gol de diferencia de estar en semifinales. Si se daba un resultado, ni siquiera de nosotros sino de otro equipo, capaz podíamos estar hablando de una semifinal.

Que lamento en el momento pero que satisfacción ahora pensarlo.

No te podés imaginar. Yo me acuerdo de estar en el mundial en sí. Ganarle a Francia por 8 goles, cuando le ganamos a Alemania que después fue el campeón, por un gol el primer partido y por un gol de diferencia quedamos afuera de clasificar con Egipto y Alemania. Imagínate que nosotros ya habíamos quedado afuera terminamos empatando con España pero teníamos un bajón, inexplicable.

Tienen este grupo armado ya de tantos años, que vienen juntos que la vienen rompiendo por todos lados. ¿Quién es el mejor ceba mate de los Gladiadores?

Acá ya tengo que mezclar. ¿Querés hablar de ese grupo en particular o ya puedo sumar a la gente más grande que es la selección mayor?

Podemos incluir cuerpo técnico también

Mira, Agustín Vidal es un gran cebador, el jugador de Viedma. Es una pregunta que no me la estaba esperando, y Fede Fernández también.

La otra trivia, ¿mejor jugador de play?, hablando específicamente, no sé si te gusta, del PES.

Te voy a ser sincero, jugamos siempre que hay un viaje, alguno se lleva la play y se arman lindos partidos y clásicos. Si me vas a preguntar te voy a decir que soy yo. Pero hay algunos varios que juegan bien. Casi siempre hacemos un torneo entre todos, que no se puede repetir equipos y siempre se sortean. Pero hay rivales duros, como Pablito Simonet. Despues Diego juega bien también, no es malo. Fede Pizarro también, Fede Pizarro juega bien a todos los juegos.

Estás en los viajes, estás en un mundial, ¿cómo se dio, por ahí en tu experiencia luego de estas victorias importantes, esta especie de fama que se le dio al deporte? ¿cómo lo ves vos conociendo al grupo?

Lo primero que se intenta decir es ir paso a paso. Esa selección desde los más chicos, cuando fuimos nosotros, siempre dio batacazos importantes ganándoles a equipos europeos.

Hablando de la actualidad de Ward, ¿cómo fue el partido con River?

Como todos los partidos con River son partidos muy friccionados, muy disputados, muy físicos. La verdad que nosotros cometimos muchos errores y esa clase de errores en los partidos así se pagan caros. Tuvimos muchos errores no forzados y hay que mejorar eso para el siguiente partido para poder estar ahí arriba.

Ahora se viene Ferro la próxima fecha ¿cómo se preparan para ese encuentro, como están planeados los entrenamientos?

Mañana justo nos toca jugar con Ferro y siempre despues de una derrota se trata de volver a la victoria. Hay que cambiar la cara al equipo y tratar de salir adelante. Quedan tres fechas. Sabemos que Ferro viene de perder algunos partidos, no están siendo muy regulares. Pero todos los rivales en el handball argentino son así, hay que estar atentos porque si tenes un mal día te pueden complicar.

Después de varios años que ya transitaste el camino del handball, ¿cuál es el mejor jugador que creas vos hoy en día?

Mejor jugador, Diego Simonet sin duda. Lo conozco de chico siempre compartimos categorías. Empezamos desde cadetes a jugar juntos y no me deja de sorprender día a día. Lo conozco desde muy chico y sigue siendo la misma persona que ese pibe de doce o trece años que conocí la primera vez. Siempre humilde siempre respetando a los rivales, siempre respetando a los compañeros y no me sorprende la actualidad que tiene hoy en día. Creo que todavía va a seguir creciendo. Disfruta de lo que hace, disfruta jugar, disfruta de compartir con amigos. La verdad que creo que es un jugador que va a seguir creciendo y nos va a seguir dando muchas alegrías.

Antes de terminar te quería hacer otra consulta, sabemos de tu experiencia en lo que fue el Fuerte Apache y de tu participación en la actividad que hicieron los chicos de Handball Libre con el partido a beneficio para Dante. En primera instancia me interesaría saber ¿cuál fue la motivación para asistir a esos espacios y cómo fue esa experiencia?

Te soy sincero, yo lo que veo es que para los chicos es muy importante si hay alguien “conocido o reconocido”, es esa situación o en ese torneo de handball por ejemplo, se puede decir que era una persona conocido entre comillas. La verdad es que si uno puede aportar desde lo más simple, que es estando, compartiendo;  yo sé que a esa gente le sirvió, a esa madre la ayudó, la vi contenta y en ese caso particular, yo me sentí muy contento porque la verdad es una satisfacción poder ayudar a otra gente. Con dignidad, con tan poco, porque es ir, estar un rato jugar un poco al handball, y como lo de Fuerte Apache. Un entrenador del Colegio, Julio Cantore me invitó a dar una charla y fue una experiencia para mi inolvidable. Son chicos que tienen millones de problemas en la casa, en la familia pero son chicos que están en la escuela, tienen que crecer, tienen que hacer deporte y creo que es el momento que tienen ellos para salir de todo eso que lo familiar, lo que los rodea y poder disfrutar otras cosas. Cuando los vi jugar al handball para mí fue una satisfacción enorme, yo creo que el deporte es de inclusión social y creo que importantísimo para los chicos.

Ahora si, para ir cerrando, hay una pregunta que hacemos siempre, alguna anécdota que tengas para contarnos, puede ser graciosa, no tanto.

Una anécdota linda buena, que a nosotros nos ayudó. Antes del mundial junior del 2009, fuimos a jugar a Túnez un cuadrangular. Resulta que nos tocó un día compartir el micro con los brasileros. Nosotros ya nos conocíamos de muchos años, pensá que cada categoría que jugábamos, jugábamos en contra y jugamos seis, siete veces la misma camada, que son varios que integran la mayor hoy. Se dio la causalidad que yo tenía PSP portátil, la chiquitita y resulta que un brasilero también la tenía, y decidimos hacer un duelo un Brasil-Argentina. Imaginate la situación, un micro con treinta jugadores en el medio de Túnez, jugando de asiento a asiento entre un brasilero y un argentino, que en ese caso era yo y era el arquero de Brasil en ese momento. Jugamos un partido, yo aproveché lo puse a Messi arriba solo y gané 4-3 y fue eufórico el triunfo que se gritó más que el amistoso, imaginate.

Gracias por la victoria Colo, nos representaste perfecto hasta en la PlayStation.


Tenía presión, se jugaba mucho podía quedar muy mal con mis compañeros. Quedó ahí fue todo canciones, canciones típicas de Messi es argentino.

Foto: Germán Paez